¿Qué es el raise en póker? Como y cuanto subir

¿Quieres saber qué es el raise en póker? ¿Quieres saber como sacarle todo el partido posible a esta jugada? ¡No te pierdas este artículo con toda la información al respecto! Aplica todo lo que leerás aquí y pasarás de ser un fish para, con el tiempo, acercarte más al juego de tiburón en póker.

¿Qué es el raise en póker?

A grandes rasgos, el raise en póker es una de las 5 acciones disponibles, y consiste en incrementar fichas sobre una apuesta anterior. Recordemos que en una partida de póker podemos pasar cuando no hay apuestas previas, es decir, hacer una apuesta de valor 0 para pasar el turno a otro jugador. Si nadie ha apostado antes, también existe la opción de hacer un bet o apuesta, que consiste en incorporar fichas nuevas al bote.

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Cuando ya nos toca hablar con una apuesta previa, tenemos la opción de hacer una subida en nuestra mesa de póker, incorporando nuevas fichas a la subida anterior. Otra opción es igualar o foldear ante el juego previo.

¿Cuál es la diferencia entre bet y raise? La diferencia entre bet y raise en póker es la existencia o no de una apuesta previa. La ciega grande sí que cuenta como apuesta previa, y hablaríamos de raise preflop, pero si somos los primeros en hablar y apostamos, estamos realizando una subida de póker. Por lo general, los mejores jugadores son aquellos que realizan más bet y raise que call o check, pero seleccionan mejor sus manos.

Normas del raise: Apuesta mínima y cuanto subir

En este punto, las normas son muy claras. Si jugamos en la versión de póker Holdem No-Limit, la subida mínima se considera como la ciega grande, siempre considerando las normas de la mesa donde estemos participando. Eso no quita que normalmente, si estamos realizando una estrategia de subida de póker, pujaremos mucho más. En el otro extremo, no hay un máximo para la subida en póker como norma general.

No hay límite en apuestas, ni en la cantidad que se puede subir, ni en las veces que se puede resubir ante subidas previas.

Ventajas de subir en póker: ¿Por qué hacer raise?

Subir la apuesta en una mesa de póker es importante si se cumplen determinados conceptos. Cuando tenemos buena mano, o bien una lectura correcta del rival, realizar un raise tiene múltiples ventajas sobre realizar un juego mucho más pasivo. Estos son sus beneficios:

• Información sobre tus rivales: Si algunos oponentes igualan tu raise y otros se retiran, puedes obtener pistas sobre la fuerza de sus manos
• Tomar acción en la mesa: Estarás controlando la dinámica de la mesa, lo que obligará a tus oponentes a posicionarse
• Obtener botes: Si detectas jugadores conservadores o débiles, cosas muy distintas, o bien haces una buena lectura, puedes llevarte un bote si así lo deaseas. Es importante no tener prisa, y si vas a tener las de ganar a la larga, aguantar ese ‘push’, y mantenerlos en la mano
• Aumentar el bote: Si tienes una mano fuerte, un raise te va a permitir meter más fichas al premio. Una subida en póker va a servir para sacar partido a tus manos fuertes

Pero no es oro todo lo que reluce. También puede haber distintos contextos y/o motivos que no conviertan un raise en lo más deseable en ese momento, o bien, vuelvan interesante subir menos.

¿Cuándo y cómo no subir en póker?

Muchos jugadores novatos cometen el error de hacer subidas desproporcionadas, incluso yendo al ‘all-in’ cuando se ven acorralados y no tienen ganas de pensar. Ven esa apuesta como una forma eludir responsabilidades, que puede salir bien o mal. Es un grave error, que te alejará de sacar valor a una buena mano, o te puede embarcar con una mano mala.

Otro punto perjudicial en las subidas de póker es no detectar cuando irse. Puede que fueras ganando en el flop, pero un rival complete un proyecto superior, y aún así resubas su apuesta por apego a una mano. En ocasiones, perder pocas fichas va a ser una victoria, mientra que en otras ganar pocas puede ser una mala noticia.

Esto nos lleva al otro extremo: a hacer un raise demasiado potente, que asuste a nuestro rival. Si llevamos un monstruo, y nos hacen una contination bet post-flop, quizás lo mejor es igualar para seguir con el rival enganchado, o una subida tímida. En todo caso, olvídate de apostar mucho para ganar mucho, y prioriza que esa mano siga viva a toda costa.

Las mejores estrategias de raise en póker

Hay diferentes formas de usar el raise en tu estrategia de póker. Es una de las acciones que suelen dar más miedo o respeto hacer, y en consecuencia, es de las que más diferencia los jugadores premium de los más normales. ¿Cuáles son las mejores estrategias de subida en póker?

• El chek-raise: Esta estrategia tan popular consisten en hacer un bocadillo a nuestro rival. Empezamos pasando para parar una trampa, y respondemos a su apuesta con una subida. Es ideal para presionar a jugadores con buena posición, sacar valor a una mano, o bien forzar un error del oponente
• Raise preflop: Subir preflop es una forma ideal de subir el estándar, para eliminar aquellas manos débiles que busquen proyectos, y centrarnos en menos rivales. También es una forma ideal de asegurarnos que nos quitamos de encima a los rivales débiles
• Raise en river: Esta estrategia se usará para cazar el bluff del rival, principalmente. Podemos incluso optar por jugar de una forma débil, para que se confíe, y subir para desmontarle en el river. También es una buena subida si vamos con las ‘nuts’, y delante tenemos simplemente un jugador con buena mano
• Subida de bloqueo: Aunque suele ser más una apuesta que una subida, en ocasiones un jugador que va a proyecto puede apostar en vez de pasar, para ocultar su estado actual, o bien para aumentar el bote. En este caso, realizaremos una subida de bloqueo para que no salga a cuenta seguir en la mano

Con todo, la gran clave de las subidas en el póker es perder el miedo. Puedes saber muy bien cuando hace raise y como, que si titubeas en echar las fichas al centro… ¡un tiburón se te comerá! Si ese tiburón de la mesa quieres ser tú, solo te queda poner tus conocimientos en práctica.